Resumen de las regulaciones vigentes sobre vuelo de cometas, procedentes de la regulación federal de EE.UU. sobre tráfico aéreo, editado por la Federación Americana de Cometistas.
1.- Nadie debe hacer uso de una cometa de forma que pueda causar daños voluntarios o involuntarios a personas y/o propiedades (art. 101.7).
2.- Nadie debe arrojar objetos desde una cometa en vuelo si con ello puede causar daños a personas y/o propiedades (art. 101.7,2).
3.- Las cometas cuyo peso exceda de 2,5 kg. no son autorizadas para el vuelo (art. 101.1).
4.- Todo tipo de cometa debe observar las siguientes precauciones:
No volar a menos de 2,5 km. de aeropuerto, base aérea, autopista o carretera.
No sobrepasar los 100 m de altura desde el suelo.
Mantenerse 120 m por debajo del techo nuboso.
No volar en lugares donde la visibilidad sea menor de 1,5 km.
5.- Si un cometista decide volar una cometa de más de 2,5 kg. a más de 100 m de altura deberá notificarlo a las autoridades aéreas, indicando su nombre y dirección, peso y longitud de la cometa, altura de vuelo y duración del mismo (art. 101.5).
6.- En el caso anterior y tras la autorización preceptiva, el cometista deberá tomara las siguientes precauciones referentes a señalizar su cometa:
A partir del ocaso del sol, colocando luces en los extremos de la cometa y en los hilos que la dirijan, en intervalos de 25 m.
A partir de la salida del sol, mediante cintas coloreadas atadas a los hilos, a intervalos de 50 m (art. 101.17).
En una reciente publicación de Ron Moulton se recoge un capítulo dedicado a las normas y consejos de seguridad durante el vuelo de cometas, que por su interés reproducimos:
"Una de las grandes atracciones que el vuelo de cometas ejerce sobre quien lo practica es la sensación de libertad percibida desde el momento en el que los hilos se tensan y la cometa inicia sus evoluciones. En ese momento, concentrados en el vuelo, dejamos a un lado las preocupaciones de cada día, dedicándonos al placer de jugar, controlar y percibir las reacciones de nuestra cometa. Pero debemos, en esa situación, respetar unas normas."
El Reglamento de Navegación Aérea de Gran Bretaña establece que la máxima longitud de hilos permitida en el vuelo de cometas sea de 60 m. Por ello, el material manufacturado en ese país, viene dotado de hilos con esa longitud. Su origen reside en el artículo 75.1 de dicho Reglamento, que establece que las cometas de hasta 2 kg. de peso no deben volar a más de 60 m de altura, contados a partir de la conexión del hilo con la empuñadura de control sostenida por el piloto.
En esencia coincide con la reglamentación de EE.UU. ampliando en 5 km. la prohibición de vuelo junto a aeródromos y bases aéreas. Igualmente este Reglamento, hace responsable directo al piloto de los daños a personas y propiedades causados durante el vuelo.
En los casos en los que la cometa supere los 2 kg. de peso, dos artículos adicionales son aplicados:
Art. 50.- Indica que en ningún momento el piloto y su cometa, deben interferir o poner en peligro a aeronaves y/o personas.
Art.69.- Señales visuales claras deben ser añadidas a la cometa y sus hilos, a intervalos de 100 m, por medio de cintas de al menos 2 m de longitud, en colores brillantes.
Estas reglas, respetadas por la mayoría de los pilotos, tienen excepciones en ocasiones tales como certámenes, campeonatos o festivales, en los cuales, los organizadores solicitan expresamente autorización a las autoridades aéreas para sobrepasar los limites de altura, en los hilos, autorizando volar a alturas que superan muchas veces los 300 m, obtener fotografías, etc., pudiendo ser realizados, a veces, dentro del radio de seguridad de 5 km. en torno a aeródromos.
El sentido común debe ser aplicado en ausencia de legislación, pues no olvidemos que las armaduras de fibra de carbono son conductoras de electricidad y de ondas sonoras, pudiendo distorsionar comunicaciones vitales entre naves en vuelo y centros de control en tierra y reproducir artefactos en pantallas de radar.
Una parte importante de estas precauciones se refieren a los riesgos propios y a terceros, que el vuelo de cometas puede producir.
Algunos incidentes conocidos demuestran que, si bien son ocasionales, los efectos pueden ser graves: un caballo desbocado por el ruido de una delta haciendo loopings, derriba al jinete y le causa una grave lesión en un brazo. La caída sin control de una cometa sobre un grupo de espectadores produce cortes en varios de ellos, que necesitaron asistencia médica. La existencia de estos incidentes demuestra que volar cometas es una actividad con riesgo y, por lo tanto, es preciso adoptar algunas medidas, por otra parte, aceptadas por la mayoría de organizadores y clubes de cometas del mundo. Podemos resumirlas en 10 reglas:
Reglas de seguridad en el uso de cometas
1.- Uso de guantes.
El uso de guantes de piel o similar previene cortes producidos por hilos
abrasivos como Kevlar o poliéster, sobre todo si son usados en el manejo de
cometas estáticas.
2.- Volar lejos de cables eléctricos de alta tensión.
Los hilos son conductores de electricidad, por lo que jamás se debe volar en
las cercanías de cables, postes o instalaciones de alta tensión.
3.- No volar en presencia de tormentas eléctricas.
Si se presume la cercanía de una tormenta, evitar volar, pues la
electricidad estática de la atmósfera puede ser conducida a través de los hilos
de control.
4.- ¡ Cuidado con los pies !
Volar una cometa obliga al piloto a concentrar su atención en la misma,
olvidando a veces de observar las irregularidades del terreno. El uso de botas
con suelas gruesas, facilita la fijación al suelo, en caso de usar cometas de
tracción y nos evitara sufrir lesiones en el tobillo. Antes de iniciar el vuelo,
inspeccionar el terreno, evitando zonas con agujeros.
5.- Buscar lugares despejados.
Evitar volar en las cercanías de aparcamientos, zonas de paseo, etc. Buscar
siempre zonas abiertas, sin arbolado ni edificios, para poder obtener el máximo
rendimiento de los vientos que soplen en ese momento.
6.- Respetar la naturaleza.
Evitar volar en zonas donde la visión de una cometa volando, o su ruido,
puedan molestar a animales anidando, rebaños, reses, etc.
7.- No volar cerca de autopistas.
Por las mismas razones del anterior punto, volar cerca de autopistas puede
distraer la atención de algún conductor y causar una colisión.
8.- Respetar la paz de otras personas.
El ruido desarrollado por algunas cometas puede ser agradable para el piloto
pero molesto para otras personas que disfrutan de un día de descanso. Evitar
volar en zonas muy concurridas, o en parajes que inviten a la contemplación.
9.- Avisar a despistados.
Muchas personas, de forma involuntaria, pueden penetrar en la zona de vuelo
con el consiguiente riesgo de lesión. Avisar de forma clara a estas personas o
colocar alguna señalización que avise de la existencia de cometas en vuelo.
Recordar que los hilos son elementos cortantes y los armazones auténticos
cuchillos. Volar con precaución si hay espectadores cerca de nosotros.
10.- Ser limpios.
Una vez finalizado nuestro vuelo, recoger restos de hilos, varillas y otros
materiales que hayamos usado.